domingo, 24 de junio de 2012

El Kirchnerismo y la “realización del deseo”.

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Hoy inauguramos, modestamente, una línea de reflexión ligada al pensamiento del filosofo esloveno, actualmente de moda en el mundo, Slavoj Žižek. No lo hacemos justamente porque su lectura denote actualidad y sofisticación, sino porque creemos sintetiza teorías sumamente complejas (Lacan, Hegel, etc.) al estudiar la “Ideología” en las sociedades actuales (o posmodernas según quien lea).

Toda interpretación de textos es arbitraria, pero aquí incluso tenemos una ventaja: explicitamos nuestra ideología política. Claro que no sabemos si Žižek estaría de acuerdo con nuestra interpretación, seguramente no, pero la riqueza de un ejercicio modesto, que no pretende ser académico en lo más mínimo, como este, radica en la posibilidades explicativas que abre. Y por otra parte en el convencimiento personal de que en América Latina el problema de la ideología no pasa por su institucionalidad estatal, sino por su sociedad civil, por el llamado sentido común. De ahí entonces que nos permitamos tomar algunos conceptos que nos pueden ser útiles a la hora de describir el funcionamiento de nociones y prácticas (praxis) del sentido común en América Latina y en la Argentina en particular.

Por eso hoy, cortito y al pie, proponemos la siguiente reflexión: aún pese a todo lo que ha hecho este Proyecto Nacional no son pocos los que cuestionan su alcance transformador, e incluso lo impugnan. Aparecen quienes niegan sus avances, y en menor medida quienes afirman su homologación con el menemismo, y por suerte pocos, que afirman una suerte de relación con la dictadura. No tiene ningún sentido responder las dos últimas acusaciones porque son tonterías de grupos sociales de poco y nulo alcance social. Sin embargo la primera es particularmente interesante porque pese a todos los logros económicos, sociales y políticos se sigue negando el carácter transformador de esa gestión de lo público que ha permitido estos resultados. Tampoco se trata claro está, de negar defectos, sino todo lo contrario, asumiendo un Proyecto Político con sus limitaciones, errores y contradicciones, así como sus deudas sociales persistentes, es como se construye una militancia verdadera y comprometida. Sin duda falta mucho todavía, y el camino transitado no está exento de cuestiones criticables, pero creemos con firmeza que este es el camino, que tenemos patria gracias a este Proyecto de País… de allí entonces que nos preguntemos cómo y por qué el “deseo” de ciertos sectores de nuestra sociedad no puede realizarse en este Proyecto Político, aún cuando la base material sea objetivamente favorable a dicho viraje, la persistencia anti-k permanece impasible.

Aquí el aporte de Žižek: Problema de la realización del deseo.

“(…) Cuando encontramos en la realidad un objeto que tiene todas las propiedades del objeto fantaseado del deseo, necesariamente quedamos a pesar de todo algo decepcionados; tenemos la vivencia de un cierto «esto no es»; llega a ser evidente que el objeto real finalmente encontrado no es la referencia del deseo aun cuando posea todas las propiedades requeridas…” (Žižek, 2003, Pág. 131)

Con esto afirmamos y sentamos nuestra principal tesis no es un problema económico, es un problema ideológico, el de ciertos sectores de la sociedad civil con respecto al gobierno nacional. Iremos profundizando de la mano de este autor y otros sobre algunos elementos de la crítica a la ideología. Entendida esta última como: la búsqueda del elemento ideológico que impide su propio cierre, es decir dentro de ese edificio aquello que es su imposibilidad (Žižek, 2003).

POLIKARPO.

Žižek, S. (2003) El Sublime Objeto de la Ideología, Editorial Siglo XXI, Buenos Aires.




miércoles, 20 de junio de 2012

ARGENTINA AISLADA DEL MUNDO

Cuantas veces desde Macri a Carrio, desde Bonelli a Zanata, hemos escuchado "Argentina está aislada del mundo"... los millones de dolres en inversiones directas, las miles de empresas que se radican en el país, la ampliación constante de nuestras exportaciones, el afianzamiento regional en Mercosur, UNASUR, CELAC... la causa Malvinas despertando adhesiones en todas partes del mundo... la Argentina entre las 20 economías más importantes del mundo (G20)... en suma la única verdad es la realidad... Argentina sigue tu camino al desarrollo! ladrá la derecha señal que incluimos!

POLIKARPO.

G20 - Los Cabos - México

Con Obama (EEUU)

Con Putin (Rusia)

Con Hollande (Francia)

Con Hu Jintao (China)

Con Santos (Colombia)

Con el anfitrión Calderón (México)

Con Rousseff (BRASIL)

Cruce con Cameron (UK)

  • Cristina apuesta fuerte por un capitalismo nacional

Los líderes del grupo de países desarrollados y emergentes del G20 abrieron sus agendas en esta cumbre decisiva para intentar unir fuerzas ante el rompecabezas del euro y la desaceleración de la economía mundial.

Y fue aquí, en el mayor encuentro de países del globo, donde la Argentina rechazó las políticas de ajuste impulsadas por otros estados. Como enfatizó la presidenta Cristina Fernandez de Kirckner en este cónclave, la salida es la creación de trabajo con políticas activas.

La Presidenta renovó, además, las críticas de nuestro país a la falta de decisión política para luchar contra los paraísos fiscales, tema que viene reclamando desde la creación del foro en 2008. También impulsó reestructurar las deudas de los países que hoy no pueden afrontarlas y hacerlo en forma conjunta y no como ocurrió con la Argentina del 2001.

En lo que respecta a nuestro país, lo más relevante fue el encuentro de la Presidenta con Dilma Rousseff, su par de Brasil. Allí acordaron llevar políticas comunes para enfrentar la crisis financiera mundial, desarrollar juntos proyectos internacionales para proteger a la región de la crisis mundial y encontrar aliados estratégicos en América latina.

En este sentido, se condice con la actividad empresarial, donde el titular de la UIA, Ignacio De Mendiguren, le anticipo a la jefa de Estado las conclusiones de la reunión multilateral con las entidades empresarias del B-20 y de la estrategia conjunta convenida con sus pares de Brasil.

"Es muy interesante -dijo De Mendiguren- el interés y la apertura para trabajar juntos de los empresarios brasileños". En el G-20, el lugar donde se define el rumbo de la economía mundial, lo más relevante fue lo irrelevante de las decisiones.

Es difícil entender como los máximos líderes del mundo se atan a recetas que ya fracasaron en los últimos 5 años y mantienen la convicción de que esas recetas lograrán cambiar la realidad, cuando la realidad les está demostrando lo contrario.

Para los argentinos nos queda el orgullo de que nuestra presidenta defendió los intereses del país con todo su ser frente a Cameron. Con valor reclamó nuestros derechos sobre las Malvinas y frente a las políticas que imponen los poderosos puso lo que había que poner para decirle a los Grandes que están equivocados, que hay que poner las economías en marcha para superar la crisis.

Y que si los poderosos se equivocan en su receta vendrán tiempos difíciles para el mundo y mucha, pero mucha gente va a sufrir las consecuencias de esas equivocaciones.

Por lo pronto, en nuestro país sería interesante que los empresarios argentinos se dieran cuenta de la ventaja de tener un gobierno y una presidenta que apuesta a un "capitalismo nacional" y que si empujamos juntos podemos crecer, ganar mercados y para cuando el resto del mundo reaccione nosotros habremos ganado años de ventaja en el desafío de crecer.

  • Cruce entre Cristina y Cameron en el G-20

Cristina de Kirchner y el primer ministro británico David Cameron mantuvieron este martes un duro cruce por las Islas Malvinas durante la segunda sesión plenaria de la cumbre del G-20. El hecho ocurrió alrededor de las 9.30 hora local (12.30 de Argentina) en el centro de convesiones en Los Cabos.
 
Según relató el secretario de Medios de la Nación, Alfredo Scoccimarro, el británico se acercó sopresivamente a la banca de la mandataria para agradercele el apoyo a la creación de un banco europeo para solucionar la crisis del euro, pero de imprevisto le exigió a la Argentina que "respete" el resultado del referéndum que los kelpers realizarán en 2013 sobre el estatus político del archipiélago.
 
"Se acercó el primer ministro de Gran Bretaña a la Presidenta para agradecerle el apoyo a la creación de un banco central europeo que actúa como prestamista, en última instancia a efectos de disipar los termores por el euro. Ahí la Presidenta le respondió, porque se acercó, que había visto las portadas de los principales medios internacionales, y que la información que estaba circulando no era el fiel reflejo de lo que estaba sucediendo en la cumbre del G-20", detalló el funcionario desde México.
 
"En ese momento el primer ministro inglés la interrumpió, diciéndole de respetar el referéndum de los isleños. La Presidente que justo tenía un sobre con los papeles, con todas las resoluciones de Naciones Unidas sobre la cuestión Malvinas, le dijo 'que quería entregárselo por que lo que realmente había que respetar eran las cláusulas de las 40 resoluciones de las Asambleas de Naciones Unidas y su Comité de Descolonización'", continuó Scoccimarro.
 
"En ese momento el ministro inglés le contestó que 'no iba a hablar de soberanía', a lo que la Jefa de Estado le respondió que ella 'tampoco pretendía hablar sobre el tema de la soberanía', y que 'sólo quería dialogar tal cual lo ordena las resoluciones de la ONU y que le quería entregar en mano ese sobre. En ese momento Cameron agarró, dio media vuelta y se fue a su banca", concluyó el secretario, que remarcó que es la "primera vez que sucede este diálogo".
 
Horas antes del encuentro cara a cara, Cameron había vuelto a acusar a Argentina de "colonialista". Sostuvo que "los isleños decidieron tener un referendo" el año próximo para decidir sobre su estatus político y destacó la necesidad de "creer en el presente en la autodeterminación, no en el colonialismo".
 
"El mensaje a Argentina es muy claro: escuchen lo que los isleños quieren", agregó el líder conservador en declaraciones a la prensa.
 
Por su parte, el canciller Héctor Timerman aseguró que esta situación evidencia que "el aumento de apoyo que ha habido en el mundo a la posición argentina está haciendo mella en el gobierno británico" y dijo que "por primera vez en muchas décadas se ven obligados a responder públicamente".
 
El jefe de la diplomacia reiteró que "es la primera vez que se produce este dialogo" y que "el análisis que hacemos es que el lugar para hablar sobre esta cuestión era el Comité de Descolonización de la ONO donde estuvo presente la Presidenta y no estuvo presente el primer ministro británico".
 
Y agregó que "en el multilateralismo, cuando uno lo respeta en serio, se habla de lo que se tiene que hablar y el encuentro del G-20 es para hablar sobre la crisis que azota a Europa".
 

  • Bilaterales: la cooperación entre Gazprom e YPF, eje de la agenda con Rusia


El dato surgió tras el encuentro entre la mandataria argentina y el presidente ruso. Además, relanzarán las relaciones con Francia.

El principal beneficio del G-20 es la posibilidad que otorga a los mandatarios de establecer reuniones bilaterales entre sí. Ayer, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner mantuvo tres cónclaves de suma importancia: con su par chino, Hu Jintao; con el mandatario ruso Vladimir Putin; y con el flamante presidente socialista de Francia, François Hollande. Estas bilaterales protocolares, por lo general, abren las puertas a la solución de controversias políticas o económicas por asuntos puntuales o generan oportunidades de acercamientos económicos y acuerdos de inversión o comerciales. Por ejemplo, durante el intercambio que mantuvieron el líder ruso y la presidenta argentina convinieron que los equipos técnicos y los presidentes de la petrolera rusa Gazprom y su par nacional YPF trabajen de forma conjunta en la búsqueda de puntos de coincidencia en el negocio hidrocarburífero, de acuerdo con lo que adelantó a los periodistas el canciller argentino Héctor Timerman al ofrecer detalles del encuentro.
Gazprom tiene las mayores reservas mundiales de gas natural con una participación del 18% y es propietaria de la mayor red global de transporte de gas con una extensión de más de 161 mil kilómetros. Además exporta gas a 30 países. “En la reunión, la presidenta invitó a Putin a que visite la Argentina”, dijo Timerman. En este contexto el canciller también comentó que Cristina le comentó a Putin “la militarización creciente que está haciendo Gran Bretaña en el Atlántico Sur de forma unilateral”. Además, el presidente Putin le confirmó a Cristina que Rusia será anfitriona de la próxima Cumbre del G-20 que se realizará dentro de más de un año, en septiembre de 2013, en la ciudad de San Petersburgo.
En tanto, la reunión de Cristina con Hu Jintao giró en torno de la visita que va a realizar al país el primer ministro chino Wen Jiabao entre el 23 y el 25 de junio próximo, sobre las relaciones comerciales y la necesidad de una integración mayor. Acordaron estrechar las relaciones entre ambas naciones y “explorar” la posibilidad de acuerdos de cooperación en distintos rubros. Además, los mandatarios coincidieron en destacar el avance que ha tenido la relación comercial y económica, que ha transformado a China en el segundo socio comercial de la Argentina, sólo superado por el histórico socio, Brasil.
Las relaciones entre China y la Argentina concretaron un volumen comercial de U$S 14.800 millones durante 2011, que según indicó el embajador de China en el país, Yin Hengmin, representó “2000 veces más que en el primer año de las relaciones bilaterales” iniciadas hace ya 40 años.
En última instancia, Cristina Fernández se reunió con François Hollande, quien, entre otras cuestiones, destacó “el trabajo de Néstor y Cristina” en la puesta en marcha de políticas para salir de la crisis económica. Cristina y Hollande se verán otra vez hoy en el encuentro Río+20, conocido como cumbre de los pueblos, que tendrá lugar en Brasil. <
 

FUENTES: http://ambito.com/ - http://www.diariobae.com - http://tiempo.infonews.com

lunes, 18 de junio de 2012

"Kirchnerismo", "Populismo" y "Clase Media"

El odio no construye, simbolo de la incapacidad de ciertos sectores
para articular representaciones políticas capaces de estar
a la altura de la historia.
Muy a tono con nuestra publicación anterior sobre el Cacerolazo, reproducimos aquí una entrevistas publicada por "Ni a Palos", a María Esperanza Casullo. Disfrutenla!

POLIKARPO

A muchos se les llena la boca con la palabra populismo. O como una reivindicación rescatada o como una acusación histórica. La verdad, no nos gusta su abuso ni para un lado ni para otro. Tal vez populismo alcance para designar al hilo que une procesos tan pero tan particulares en un mismo continente. María Esperanza Casullo, politóloga, docente y alma máter de uno de los mejores blogs que dio el kirchnerismo (Artepolítica) ayuda a pensar desde el corazón de ese concepto. Y lo hace comparando los procesos de los distintos países “molestos” de Sudamérica.

Vos hacés un laburo que es una suerte de populismo comparado sobre las experiencias de Ecuador, Venezuela, Bolivia, Argentina. En ese marco, ¿cómo definirías al kirchnerismo?
-El kirchnerismo es una forma un poco extraña de populismo. Si uno lo compara con otras experiencias continentales, desde ciertos aspectos es el populismo menos populista. Para empezar, el populismo como yo lo defino tiene que ver con un régimen con un alto factor de movilización, o sea, que está basado no en un partido o una coalición de partidos sino en un movimiento que articula organizaciones sociales y gente de a pie pero que es constantemente llamada a movilizarse para apoyar y que tiene un discurso anti-elite y anti-sistema. Y el kirchnerismo tiene la característica de que en general no es movilizante, por lo menos no como en Venezuela, Ecuador o Bolivia. Lo ha sido tal vez en momentos aislados como la crisis del 2008, pero en general es más institucionalista en un montón de cuestiones. No hizo un reforma de la constitución, como sí pasó en Venezuela, Bolivia y Ecuador, no constituyó un movimiento nuevo, hizo algunos intentos con la transversalidad pero siempre, hasta el día de hoy, su columna vertebral es el Partido Justicialista y las organizaciones del peronismo. Por otra parte, los discursos kirchneristas no tienen el grado de denuncia que sí tienen los de Chávez, por ejemplo. Son discursos en general –salvo en momentos de mucha puja política como en 2008- muy centrados en el Estado, en los números de las políticas públicas, son más institucionales en ese sentido. Y además el adversario es muy distinto también, porque en sus discursos la construcción de ese adversario es bastante impersonal: es la banca, las finanzas internacionales, son los fondos buitre, no hay una denuncia de “la oligarquía argentina”, por ejemplo.
¿Pero con Clarín no se jugó esa carta de construir un enemigo con nombre y apellido?
-Bueno, justamente, el tema en donde sí Argentina es bien populista es en la denuncia de los medios de comunicación. Por ejemplo, Evo no hizo una ley de medios, sí la hizo Chávez y el tema de medios es también central en Ecuador. En Uruguay y en Brasil, por ejemplo, estuve leyendo unos textos de un politólogo que dice algo muy interesante. Dice que los gobiernos de Uruguay y Brasil, que no son populistas claramente, no avanzaron en el tema mediático no porque no quisieron sino porque no pudieron. Es interesante porque el tema medios estaba históricamente dentro de la agenda de PT. Democratizar la estructura de medios está entre las primeras reivindicaciones del PT. Y sin embargo esa es una de las cosas que el PT no pudo hacer. Al revés que los Kirchner, que hasta la explosión de la crisis del campo no habían puesto el tema medios en el debate pero que a partir de ahí adquiere mucha centralidad.
En este contexto histórico, en todos los países de América se dan procesos populares interesantes, pero parece que donde más rasgos populistas se detectan es en los menos desarrollados.
-Sí, salvo en Argentina, que siempre es el caso que desafía las clasificaciones. Pero si uno ve las variables que generan mayor posibilidad de aparición de populismo a finales del siglo pasado tienen que ver con dos cosas: la primera es que cuanto más fuerte fue la crisis del neoliberalismo, mayores condiciones se dieron para la aparición de un liderazgo populista. Una de las características que se da en Chile, Brasil y Uruguay es que no tuvieron una implosión trágica de las políticas neoliberales como si hubieron en Argentina, Bolivia o Venezuela. Eso explica en parte que no haya habido experiencias populistas allí.
Y lo segundo tiene que ver con la debilidad del sistema de partidos. Los países que se consideran con los sistemas de partidos más fuertes –Uruguay, Chile, Costa Rica, en América- no tuvieron, desde los 80 para acá, la aparición de liderazgos populistas. Es decir, se tienen que dar dos condiciones: la explosión del neoliberalismo y la explosión del sistema de partidos. Y eso, de alguna manera, crea un vacío que hace posible la aparición de estos liderazgos populistas.
Brasil y Argentina parecen pararse sobre una paradoja: porque la experiencia de transformaciones neoliberales ya ocurrió –y limitan el horizonte de cambios- y a la vez son gobiernos que avanzan sobre el fracaso de esos paradigmas.
-En el caso argentino la gran diferencia con las otras experiencias populistas es la existencia del PJ, que genera un fórmula de gobernabilidad que es distinta. El caso de Chávez o Correa es el de líderes que llegan de arriba al poder, llegan de afuera. Correa era un profesor universitario antes de ser presidente, sube sin partido, sin representantes en el Congreso, tiene que armar de cero. Y Chávez también. Venía con el movimiento bolivariano de antes pero no tenía un partido. El caso de Evo es distinto porque no tiene un partido pero sí responde a un conjunto de organizaciones sociales y viene de ahí.
En el caso argentino la estructura de gobernabilidad del PJ opera como soporte y como un moderador del propio kirchnerismo, no tanto en el sentido de las políticas públicas sino en la capacidad de armar un movimiento nuevo, y la capacidad de reconfigurar de manera radical el sistema de partidos.
¿Cuál es la relación de kichnerismo con la clase media?
-Yo lo pondría al revés, me preguntaría por la relación de la clase media con el kirchnerismo. Es decir, el kirchnerismo es lo que es, y algunas de sus claves hoy son las mismas que en el 2003, y yo creo que a pesar de que cada tanto algunas de sus figuras salen con un ataque de jaurechismo explícito, el kirchnerismo se imagina como un partido de clase media. Los Kirchner no son Evo Morales, su narrativa familiar es de clase media.
Y tal vez lo que más confirme eso es ese discurso tan anti clase media de ciertos sectores de la militancia kirchnerista. En la medida en que sólo la clase media odia a la clase media.
-Totalmente, eso es lo que te fija a la clase media. Solamente la clase media se pregunta qué es y qué hace la clase media. Pero creo que lo interesante es la relación de la clase media con el kirchnerismo. Por ejemplo, en el caso venezolano, la clase media es y fue antichavista. Pero acá tenés mucha ambivalencia, y la relación es más inestable: uno puede pensar que es posible que alguien que en octubre votó a Cristina esté caceroleando seis meses después, y tal vez en tres meses vuelva a apoyar.
Además, en Argentina la clase media tiene densidad electoral (es mucha gente) y densidad discursiva. El humor del país es el humor de la clase media.
-Es cierto, pero creo que el peso discursivo es el determinante. Vos, por ejemplo, ves los medios dominantes en Chile, y son voceros de los valores de la clase alta chilena, mientras que acá los medios se imaginan a sí mismos como voceros de la clase media. Lo que durante años yo llamaba “la identidad Clarín”: Norma Aleandro, Alfredo Alcón, no era la cultura alta, no era la ópera. Y respecto al peso electoral diría: no se pueden ganar elecciones sin la clase media, pero con ellos solos no te alcanza. Y esa es una de las grandes dificultades para la constitución de un sistema de partidos liberal en Argentina, porque con los sectores medios no te alcanza. Es el dilema del Frente Amplio Progresista, por ejemplo.
Al mismo tiempo, el problema hoy es que “el malón” está en el clase media, es decir, el ruido al que hay que estar atento para que no venga el malón no está en La Matanza, está en Caballito.
-Es así, eso lo escribió Manuel Barges en su blog en estos días. Dice que altera más un cacerolazo de 50 tipos en Callao y Santa Fe que un saqueo de miles en Moreno. Y al mismo tiempo, el problema es que vos no podés gobernar sólo para la clase media porque un gobierno así dura 8 meses. Pero vuelvo, por la influencia de los grandes medios o por el modo de circulación social de significados o como queramos llamarlo, a la clase media le es mucho más fácil generar solidaridad en las clases populares por sus demandas que al revés. Es más, la capacidad de los sectores populares de generar solidaridad en la clase media en torno a sus demandas es cercana a cero. En los 90 el verdadero fin de régimen se vivió cuando la que protestó fue la clase media.
Vos viajás bastante a Estados Unidos y estás atenta a su dinámica política. Nos gustaría hablar sobre Obama y empezar con una pregunta: ¿un kirchnerista argentino en Estados Unidos sería demócrata o republicano?
-Y… soy demócrata en Estados Unidos. Pero al mismo tiempo se da este fenómeno que los populistas allá son republicanos, no demócratas. Es algo interesante. En Latinoamérica hoy el populismo es la izquierda y en Estados Unidos y Europa es la derecha. Es decir, los fenómenos movilizantes con una retórica anti-elite, anti-capitalista, anti-corporaciones o anti algo, hoy en Estado Unidos son de derecha. Lo interesante es que la izquierda en los 90 se vuelve una izquierda tecnocrática que imagina que la política es un conjunto de problemas y que cada uno de ellos tiene una solución. Y el problema es que ese es un discurso que no apela a momentos de crisis. Obama en su campaña había mostrado una oratoria y una capacidad de movilización que hicieron que muchos pensaran que iba a hacer un gobierno más populista, en un contexto en el que la política es una cuestión absolutamente profesionalizada, desmovilizada y gobernada por la ecuación económica entre capacidad de gastar en una campaña y cantidad de votos que vas a obtener. Y lo interesante es que Obama sube diciendo “No queremos desperdiciar esta crisis”, y todo el mundo pensó que venían medidas tendientes a cambiar la estructura económica y a castigar los crímenes contra los derechos humanos de la administración anterior, y luego lo que dice es “no vamos a mirar para atrás, vamos a buscar el consenso”. Y eso hace los primeros años de mandato.
Y no le va bien.
-No, hay una pequeña reactivación pero ahora la desocupación volvió a subir.
¿Y la reelección está complicada?
-Yo creo que va a ganar pero muy ajustadamente, pero lo que sí no va a ser es una “presidencia transformacional” como la llaman los norteamericanos, es decir, Obama no quiso o no pudo llevar a cabo ninguna transformación importante de la manera en que se hacen las cosas en Estados Unidos. Y paradójicamente, los que aparecen con mayor capacidad de movilización son los republicanos.
¿Y ese populismo es popular?
-El pobre en Estados Unidos no participa en política, en las mejores elecciones vota en promedio el 40% del padrón y la participación es con un claro sesgo de clase media. Así y todo, es la derecha la que mayor posibilidad tiene de penetrar con su discurso entre los pobres, con la excepción de Obama, que por su solo origen tiene una capacidad de penetrar en los sectores afroamericanos como nadie.
Podríamos ponerlo así: los pobres afroamericanos son demócratas y los pobres blancos son republicanos.
-Sí, pero con una diferencia: las minorías afroamericana o latina, en proporción, participan de las elecciones en mucho menor número. Una de las grandes diferencias es que uno puede discutir si estos regímenes populistas en Sudamérica son buenos o malos, pero lo que nadie puede discutir es que son regímenes que tienen enraizamiento en lo popular, que rearticularon algún tipo de relación de las clases populares con la política y con el Estado; mientras que lo que vos ves sobre todo en las izquierdas de Europa y Estados Unidos es la casi total ausencia de esa relación con lo popular. Al mismo tiempo, estos populismos actuales se dan en el contexto de una fuerte crisis de las izquierdas y del marxismo, es decir, lo que se ve es que estos gobiernos encarnan la posibilidad de construirse como antisistémicos en un contexto en el cual no existe un paradigma sobre cómo ser antisistémico, lo son como pueden, peleándose con los actores económicos que aparecen en el momento. Eso es lo que en Europa y en Estados Unidos no pasa, las izquierdas allá tienen una lectura política en la que los procesos sociales no tienen culpables ni responsables.

FUENTE: http://www.niapalos.org

sábado, 16 de junio de 2012

EL GUERNICA ARGENTINO


16 de junio de 1955
Un día como hoy, el 16 de junio de 1955, la aviación naval bombardeó y ametralló la Plaza de Mayo y otros lugares de la Ciudad.
350 muertos y más de 1.000 heridos y mutilados fueron la terrible consecuencia del primer y único bombardeo de una fuerza estatal contra hombres, mujeres y niños que a esa hora, las 12,40 del mediodía, transitaban inocentemente hacia el lugar de trabajo, hacia las aulas o participando de una excursión escolar.
El saldo es este dolor que aún perdura. Allí, en ese crimen de lesa humanidad cometido contra el pueblo, los genocidas y los comandos civiles que los apoyaban adelantaban lo que vendría después.  La ausencia de justicia les allanó el camino.  
  • No hay que olvidar este día.
  • No olvidar es recordar para aprender de la historia.  
  • No olvidar es no tener rencor ni sed de venganza, sino alzar entre las manos la pierna de esa mujer que se desangra ante el gesto impotente de la maestra y su alumno que también se está muriendo.  
  • Nadie tiene derecho a olvidar tanto dolor humano.
  • No olvidar es reaprender a amar después de la crueldad.
  • No olvidar es recordar que muchos políticos de la oposición de entonces, justificaron esta masacre.
  • Creían que mataban a Perón y estaban matando a un pueblo.
  • No olvidar es recordar que entre los asesinos estaban Cacciatore y Massera, los mismos genocidas de la última dictadura.
  • No olvidar es saber que todos fueron indultados y homenajeados por la autodenominada “Revolución Libertadora” de Aramburu y Rojas.
  • No olvidar es saber que durante décadas nadie hablaba de esta tragedia argentina, que por lejos resulta una de las mayores tragedias de la humanidad.
Picasso decía que “la pintura no está hecha para decorar las habitaciones. Es un instrumento de guerra, ofensivo y defensivo, contra el enemigo”. Hablaba de su más célebre obra: “Guernica”. Ese cuadro refleja dramáticamente el bombardeo aéreo de la Legión Cóndor de la Alemania nazi contra el pueblo vasco de Guernica, de 5 mil habitantes. Se sabe que murieron allí 126 personas. Los bombarderos de Hitler y Mussolini buscaban abrirles el paso a las tropas de Francisco Franco, en plena guerra civil española. 
No es extraño que el mundo entero se conmueva al mirar la obra de Picasso. Los españoles no olvidan Guernica. Ni los fusilamientos del 3 de Mayo de 1808 retratados por el genio de Goya. Están allí para recordar el horror de la guerra. Y no repetir la tragedia. Pero Plaza de Mayo no era un campo de batalla ni Argentina estaba en guerra.
Que no haya olvido, sino memoria, verdad y justicia, es la mejor manera de rendir homenaje a los compatriotas asesinados ese día.
Un homenaje que se consagra con un país cada vez más igualitario.
fuente:


domingo, 10 de junio de 2012

A MI CLASE MEDIA…


A la luz de un triste pero minúsculo acontecimiento como fue el “cacerolazo” del dólar, del jueves pasado, me dispongo a reflexionar sobre algunas cosas interesantes que hacen al comportamiento de la clase media, clase de la que soy parte sin duda.

Algunos de los motivos de los "auto-convocados"
‎Según el diario La Nación ayer se movilizó alrededor de 6.000 personas hacia Plaza de Mayo. Siguiendo los datos del último Censo Nacional de Hogares, Viviendas y Personas, la Capital Federal tiene una densidad de 14.450 habitantes por kilometro cuadrado. O sea estamos hablando apenas de un par de manzanas de CABA. Esto lo digo para situar la “representatividad” del acto político de ayer. Sin embargo esta ocasión insignificante, me parece oportuna para introducir algunas reflexiones.

Curiosamente muchos marchaban con consignas que hacían referencia a los que “Piensan distinto”. Que yo sepa los que “Piensan distinto” son dueños de los principales multimedios que han gozado de poder de veto en las últimas décadas en la Argentina. Ellos pueden no solo “pensar distinto”, sino decirlo y publicarlo en sus múltiples emisores de señal televisiva, radioemisoras, prensa escrita (diarios y revistas) y soportes informáticos (webs de las más visitadas, redes sociales, etc). Y además los que “Piensan distinto” ganan elecciones como en CABA que vienen gobernando hace un rato largo ya. Algunas fracciones de la clase media, se quejan cuando les asignan la categoría de “gorila”, las mismas que ven a un morocho y le dicen “negro de mierda”, o miran una Plaza repleta de gente y exclaman que “van por el pancho y la coca”. El Jueves muchos fueron por el “pancho de la TV” y la “coca del sentido común”, no nos creamos mejores a nadie, basta de mirar con desdén a los sectores populares y a la clase obrera (por otra parte he ido varias veces a la Plaza y sigo buscando las miles de parrillas para hacer tantos choris!!).

También había consignas de denuncia de “persecución”, cuando el odio, los insultos, los ataques a periodistas y la soberbia estaban altamente representados en muchos de los que portaban esos carteles. No hay que condenar ningún reclamo, y en la Nación Argentina todos y todas tenemos derecho de manifestarnos por lo que creemos justo, pero derecho al odio jamás habrá. Agredieron periodistas física y verbalmente, insultaron a la Presidenta hasta el hartazgo, consignas racistas y xenófobas brotaban por doquier, y luego se victimizan como “minoría oprimida por la Diktadura”… A propósito: DiKtadura de Cristina, Tiranía de Perón…. ¿2012 o 1955?

¿"No es por los dólares"?
Es muy interesante el hecho que se hayan aglutinado diversidad de reclamos ayer en la plaza. Pero sucede que uno no puede reclamara “por todo”, porque entonces termina “haciendo agua” el reclamo y marchando “por nada”. Y los vacíos, así como los vapores, no existen en política. El Poder no se evapora, por ejemplo el BCRA perdió poder en los 90 en la economía nacional, y lo adquirieron un puñado de Bancos extranjeros privados, no se evaporó. Tampoco la Política ampara lugares “vacíos”, generalmente no tardan en llenarse, o ser montados por algún actor social en busca de una buena excusa para emerger en escena.



Fuertes reclamos "anti-zurdaje" y "anti-comunistas" 
El “cacerolazo” fue “fogoneado” por los medios, e incluso Partidos Políticos de Bandera Amarilla (que obvio no estaban presentes) y que hace poco “abrazaron Tribunales”. El dólar fue el motivo del cacerolazo al cual adosaron, desesperadamente, con vocación aglutinante, algunos reclamos. Esos reclamos pueden ser justos o injustos, sin duda debatibles y atendibles en algunos casos, no es intención mía extenderme sobre alguno en particular, en notas anteriores hemos respondido en cuestiones de inflación por ejemplo. Pero aquí quiero señalar que el motivo detonante fue el dólar, si tenemos una mirada más amplia de la coyuntura nacional veremos que este episodio, de escasa repercusión, se inserta en la puja de las Corporaciones del Agro por forzar al Gobierno a la devaluación. En este post no desarrollaremos los catastróficos efectos en lo económico y social de una devaluación abrupta, que mientras tanto tendría un efecto multiplicador inmediato en las ganancias de estos sectores.

Escasa repercusión nacional, aquí centro de Mendoza.
Como vemos nuevamente la clase media, como en 2008, movilizada a favor de quienes no piensan en ella. De hecho, cortito y al pie, en 2008 el Gobierno buscó implementar una medida de fuerte impacto anti-inflacionario, las retenciones móviles a las exportaciones, y allí, como ayer, nuestra clase media salió apoyar a las Corporaciones Patronales, curiosa la claridad y la “dignidad” de los auto-convocados. La historia se repite dos veces, enseñaba Hegel, primero como tragedia luego como comedia, y esa es la diferencia entre 2008 y lo de ayer. En 2008 la clase media fue arrastrada en todo el país, el jueves fue paupérrima la concurrencia.

A continuación tenemos un resumen de la participación política de la clase media en la historia argentina hasta el 2002. Y es que el artículo que traemos aquí es del filósofo y escritor Nicolas Casullo publicado en enero del 2002, a pocos días de las jornadas del Cacerolazo que coronó la caída de De la Rúa. Muchas de sus sugerencias para reflexionar siguen vigentes, ya que el 2008 ha demostrado que algunos sectores todavía no reflexionaron sobre la Argentina nueva que comenzó a brillar a partir de Mayo del 2003. Claro que el 54% nos habla que otros sectores, entre ellos muchos de clase media, hemos tomado conciencia del rumbo actual y lo apoyamos decididamente.

 “Qué clase mi clase sin clase”, por NICOLAS CASULLO*

Llamado!
La dificultad para dar cuenta de los elementos que componen la encrucijada argentina termina convirtiéndose –en nuestras intensidades mentales y café por medio– en la tentación cotidiana de encontrar cada quince minutos y sin mayor dificultad el enigma revelado de lo nacional que nos hace. Esto es, descifrar después de cualquier noticiero de estos días –con el resto de saliva que nos queda y haciendo que miramos la ventana cuando ya no miramos nada– los secretos increíbles y finales del ser argentino, desde una divagación reduccionista y apenada por el papelón de nosotros a los ojos del mundo.

Así es, se trata de auto-orientarnos en un presente tenebroso, teniendo claro únicamente que nuestra inspiración se agiganta cuando nos topamos, de tanto en tanto, con el protagonismo de los descuajeringados “segmentos” de clase media. Representantes diversos de las clases medias sobre todo capitalinas, con su protesta y cacerolas en las calles del estío y diciendo al resto de la familia después de agarrar la champañera y un tenedor salgo y vuelvo, voy a voltear a un presidente, déjenme la cena arriba de la heladera. En ésa estamos. Digo, de pronto encontrarse no ya con Walter Benjamin o Michael Foucault sino persiguiendo el arcano cultural de tía Matilde.

Por la "libertad", ¿1955?
Si uno hace historia de esta clase media, historia barata, que no cuesta mucho, gratis diría cuando tenemos el sueldo encanutado, podría argumentarse: una clase media que viene de un radiante y a la vez penumbroso viaje. Viene desde aquélla, su ingenua estación inaugural de los años 50, donde él se puso el sombrero y la corbata con alfiler, ella la permanente y la pollera tubo, y ambos salieron casi virginales pero envenenados a festejar en la Plaza de Mayo la caída de Perón al grito de “no venimos por decreto ni nos pagan el boleto”. Cancioncilla tan escueta como cierta, interrumpida por saltos en ronda a la Pirámide para entonar “ay, ay, ay, que lo aguante el Paraguay” sin ningún tipo de grosería ni mala palabra con las que hoy se luce cualquier animador de pantalla, pero nunca mi padre. 

¿Qué significa basta?
Después la clase volvió a meterse en casa para advertir, con menos recelo, que los morochos sobrevivían a todos los insecticidas ideológicos y censuras, y para dedicarse no sin cierto cansino asombro a departamentos en consorcio, Fiats en cuotas y palmitos con salsa golf y rosado. Recién a fines de los 60, principios de los 70 el gran estamento medio recibió la primera monografía fuerte a componer, de la cual culturalmente no se repuso nunca jamás, para entrar en cambio en el jolgorio y la confusión liberadora de distintos eros. Fue cuando los hijos, ya grandulones, arruinaron cada cena o almuerzo dominguero con la “nacionalización de las clases medias”, al grito en el comedor en L de “duro, duro, duro, vivan los montoneros que mataron a Aramburu”.

Tamaña reivindicación de arrabaleros no estaba en los cálculos de la clase media blanca de abuelos migradores, pero nadie se arredró en la cabecera de las mesas –ni escurrió el cuerpo en la patriada, hay que admitirlo– aunque apenas entendiesen la metamorfosis de la nena que además copulaba en serie con novios maoístas, peronistas y con dudosos nuevos cristianos. La cuestión era la liberación de la patria frente a una vergonzosa dependencia al imperialismo, también tirarles flores desde los balcones de las avenidas a las columnas infinitas de la JP que gritaban “paredón”, y votar sin vacilaciones en marzo del ‘73 a ese candidato cuyo lema en los carteles decía: “ni olvido ni perdón, la sangre derramada no será negociada”

Tiempo y silencio le costó a la clase volver a salir otra vez a la plaza después de esa canita al aire. Prefirió desde el ‘76 salir a Europa, a Miami, o a la frontera del norte misionero en largas columnas de autos compradores de TV a color, al grito desaforado en los embotellamientos de “Argentina, Argentina” tal vez porque también en colores habían sido los goles de Kempes. Sin duda se trataba ya de una mentalidad o imaginario de clase más bien desquiciada, pero no culpable del todo: en historiografía todas las conductas colectivas no tienen un psicoanalista sino la justificación de los contextos. Regresó a la plaza, emocionada y agradecida por no escuchar más sirenas policiales ni rumores sobre la casa de la esquina, para vociferarle presente con banderitas argentinas al beodo general de las Malvinas desde un resto patógeno del nacionalismo de los 60/70 guardados en alcanfor. Para pensar trascartón que los chicos, allá en el sur bélico, eran como los del exilio o los que seguían en cosas raras: era fatalidad, violencia, guerra, delirio, caminos ciegos de la multitud en la plaza que siempre le pusieron, a la clase, la piel de gallina emocionada. Dulce y patriota tilinga. 

Es una clase, entendamos, que no descarta ni parte en dos nunca las aguas. Que los amontona, sin decidirse por ningún telos de la historia. Los acumula escondidos en el placard como cartas de otro novio, no del marido cuando joven. Coleccionista histérica y siempre arrepentida: así apuntan algunos sesudos que la estudiaron por años. En el ‘83 caminó las calles con los jóvenes de Peugeot y boinas blancas apostando por la vida radical frente a un peronismo cadavérico cadaverizador. Festejó, danzó, cantó, se olvidó de sí misma y sus años recientes. Más tarde mandó a los más jóvenes a las plazas de la memoria de la muerte, pero ya no pudo relatar su sencilla biografía como sucedía en los 50 y 60, sino sólo fugazmente, a retazos: ¿qué, cómo, cuándo, dónde estoy, estuve, no estaba, quién, ella, no, yo? ¿Hasta Ezeiza caminando, papá, y vos qué hiciste ese día abuela, y donde murió el tío? 

Santa Fe y Callao
Una última vez salió la ingrata con el gorro frigio, en absoluta dignidad y defensa de los valores señeros de una crónica tan patria como esquiva. Gritó, entonó, puteó como siempre, pero justo ese día empezaron a decirle canallescamente pura verdura: la casa está en orden, festejen tranquilos las Pascuas. Al otro día nadie confabuló, nadie se reunió a decidir, no se conoció un solo panfleto que resumiese el programa nacional clasemediero, pero lo cierto es que no volvió a vérsela junta sobre el asfalto por quince larguísimos años. 

Ella es entonces como napas inclementes de ella misma. Como subsuelos abollados de sus gestos unos contra otros. Como recuerdos surcados por lombrices. Como una maroma amontonada de liberación nacional, Evita socialista, déme dos, plazo fijo, abajo Holanda, la tablita, el miedo, algunas locas de la plaza, piratas ingleses son argentinas, nos los representantes de la nación, democracia, aparición con vida, si se atreven incendiamos los cuarteles, están asaltando las góndolas, cerrá las celosías, espiá por la ranura, ¿qué pasa mi amor, son los cabezas otra vez? Como amasijo, un día finalmente le llegó el cansancio en el alma. Que es la venta del alma, dicho de otra forma. 

¿Representatividad?
Para colmo se moría la clase obrera, testigo de todo para el día del juicio final. Para colmo se vendió el país, el peronista Menem instrumentó la utopía y pesadilla: la convidó, la invitó, la enajenó, la cosificó según Marx, la subyugó “uno a uno”, remató una vieja nación coronada su sien, liquidó identidades, lenguaje, nombres, pequeñas tradiciones, recuerdos, ideología. Y tuvo en esa clase media uno de sus buenos soportes simbólicos, concretos y votantes, cuando la ilusionó de que no existían más ni peronistas ni gorilas, ni izquierdas ni derechas, ni arriba ni abajo, ni ricos ni pobres, ni primer ni tercer mundo. Cuando ya no existían tampoco políticos. Sino sólo la promesa de bancos siempre abiertos para cualquier hombre de bien. Y para que nada de eso se tocase, para que nada torciese el espejismo ni el rumbo, el hombre nada fue votado por la clase: Fernando. 

Ahora vienen los sociólogos exitistas o agoreros de siempre. Intelectuales. Apuntan: clase media heroica en las calles anulando la dieta de los diputados de Formosa como salida histórica para toda América latina. Clase media corajuda, pueblo irredento de las cacerolas con las cabezas de los nueve delincuentes de la Corte adentro. Clase media volteadora a ollazo limpio de gobiernos impostores que parecían eternos. Clase media puta, nieta legítima de sus abuelos tanos y gallegos angurrientos de morlacos, dicen. La Argentina únicamente valió si te daba guita, después no existe: así dicen de la pobre clasecita, ahora a los alaridos frente a la Rosada y rodeada de temibles saqueadores casi en pelotas. Porque salió otra vez a la calle por fin. Acorralada. A corralito y lanza en mano esencialmente. Ahí anda embistiendo. El enemigo son los políticos. No, es la izquierda. No, los corruptos. No, es la petrolera. No, es el populismo y la demagogia. No, son los bancos. No, son las empresas privatizadas. No, es el liberalismo. No, son los gallegos imperialistas como en 1810. No, son los negros peronistas otra vez en la capital. Anda desorientada la pobre, pero soliviantada como nunca. 
"BASTA"
La propia historia que relato –antojadiza, falsa, liviana, inoportuna– devela el interesante claroscuro de la clase analizada. Sus extrañas medias tintas. Sus románticas luces y sombras espirituales. Sus insondables claros de luna. Sus materialistas intracontradicciones objetivas, diríamos allá por 1972 donde todo era salvable. Ahí está cenicienta y ramera con su fuerza y su talón de Aquiles. Llama a las revoluciones, pero un plazo fijo la embota como niña enamorada adentro de un granero. Ahora su lógica navega al compás de movileros descerebrados, cámaras amarillas de Crónica TV, al ritmo de su justa furia por dólares encarcelados, por su real hartazgo de una clase política que nada hizo cuando el país desapareció, sino que casi se fue con él. A lo mejor algún día pueda volver a contar su biografía. Igual que antes, allá por los 50, cuando no había salido del patio de magnolias.

CONCLUSION

Casullo falleció a finales del 2008, finalizado el conflicto con las Patronales. El relato que vimos nos debe servir para confirmar nuestra convicción política esclarecida, y para aquellos que todavía no se dieron cuenta del momento histórico clave en el que estamos es una buena ocasión para la reflexión. El resumen de la historia de nuestra clase es impresionante, pero no debe ocasionar “llanto sobre la leche derramada” al contrario es hora de asumir nuestra responsabilidad histórica, y seguir profundizando el Proyecto de País, única respuesta de unidad nacional y de gestión organizada para satisfacer, en democracia y equidad, las legítimas demandas del Pueblo Argentino. Como hemos dicho muchas veces, y no nos cansaremos de reiterar, sin duda falta mucho, sin duda no hay Gobiernos perfectos, pero este Proyecto es la oportunidad para avanzar por todo lo que falta hacer, es la única senda del cambio real y por eso lo defenderemos. Y aquellos que quieran podrán criticar, y podrán organizarse políticamente, y bienvenido será la emergencia de nuevas fuerzas políticas, pero no nos perdamos la posibilidad de realatar nuestras biografías de clases medias nuevamente.

La derecha defensora de Genocidios con Ceci Pando a la cabeza.
Tampoco nos cabe la menor duda que el “cacerolazo” del Jueves no fue una movilización espontánea, apolítica y en paz. Creo que ya desde el inicio, la poca organicidad del acto político del jueves quedaba clara en su slogan: “autoconvocatoria de los argentinos indignados”, ¿qué clase de auto-convocados se organizan por diversos medios para un fin determinado? Se trata casi de un oxímoron, que encubre otra cosa. Esto lo señalo porque no está “mal” marchar en sí, pero es importante asumir la responsabilidad histórica, y saber que ningún vacío permanece como tal mucho tiempo, y que no vaya a ser que por buena voluntad, algunas cosas con o sin razón, y un poco de bronca, le hayamos regalado una Plaza o una cacerola a sujetos que tal vez no imaginamos beneficiar o quisiéramos cerca… En tanto Biolcatti llamó al corte de rutas, y siguen presionando por la devaluación, casualidades no hay en política por lo menos…

Tengamos clara conciencia de que en la Argentina la contradicción fundamental no es entre Gobierno y oposición, sino entre Gobierno y Corporaciones, y en este momento una cacerola no se puede regalar gratuitamente al poder del Mercado. Reclamen aquellos que critican, pero háganlo en el marco de la democracia y el respeto. No se permitan agregar otro capítulo vergonzoso y berreta como en 2008.

Fuerza Argentina, Fuerza Cristina! Ni un paso atrás!

POLIKARPO.




  
FUENTE: PAGINA 12: Domingo, 13 de enero de 2002 http://www.pagina12.com.ar / La Nación: http://www.lanacion.com.ar/1480231-cacerolazo-en-la-plaza-de-mayo  

*Nicolás Antonio Casullo (Buenos Aires, 10 de septiembre de 1944 - ídem, 9 de octubre de 2008) fue un filósofo y escritor argentino. Filósofo, novelista, ensayista y docente. Fue profesor titular, director de posgrado e investigador en la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Buenos Aires y en la Universidad Nacional de Quilmes. En 1968, participó en el Mayo Francés. Plasmó sus experiencias y su visión del fenómeno en su libro París 68 (1998). Militante peronista, se exilió en 1974. Estuvo en Cuba y Venezuela. Finalmente se radicó en México. Fue profesor en la Universidad de México (UNAM) y consultor de la Universidad de París. Regresó a su país en 1983. En abril de 1995 fundó la revista Pensamiento de los confines junto con Alejandro Kaufman, Matías Bruera, Ricardo Forster y Gregorio Kaminsky; en ella participaron, entre otros, Diego Tatián, Héctor Schmucler, Oscar del Barco, Marcelo Percia, Ana Amado, Marcelo Burello y Eduardo Grüner. En 2004 ganó el premio Konex de Ensayo Filosófico. Fue miembro del Consejo Asesor de la Biblioteca Nacional. Fue uno de las figuras principales del Espacio Carta Abierta, que nuclea a intelectuales kirchneristas. Falleció a los 64 años el 9 de octubre de 2008.

sábado, 2 de junio de 2012

¿Qué pasa con el Dólar?


En esta reflexión queremos introducir algunas variables para complejizar el juicio sobre la cuestión del dólar en esta coyuntura económica que se vio trastocada por las recientes regulaciones en lo pertinente a la compra y venta de divisas. En una nota anterior a principio de año hacíamos una diagnostico, que en esta coyuntura es necesario complejizar y actualizar, aunque no hay elementos que muestren un cambio de rumbo en el modelo económico, al contrario se trata de su profundización y consolidación. En términos de la Presidente del BCRA Mercedes Marcó del Pont: “La Argentina ha venido consolidando un proyecto económico que es muy sólido, que hay que ajustarlo, mejorarlo, que hay que hacerle sintonía fina. Pero que tiene una capacidad endógena de crecimiento, y que le ha permitido ampliar enormemente su capacidad para hacer política económica. Lo que ha significado acumulación de reservas, el uso de reservas, la regulación de la cuenta capital. La Argentina se aisló de todas las movidas especulativas y de los humores de los mercados financieros, lo que ha permitido eliminar el famoso descalce de monedas. Hay mucho de estos cambios estructurales que hablan de otro país.”
Volviendo al tema de esta nota, para nosotros en la sociedad argentina el dólar ha sido constituido en el imaginario social cual objeto de protección frente a los avatares macroeconómicos. Esto ha sido posible porque en 1977 el ministro de Economía de la Dictadura Genocida, puso en marcha un plan de liberalización del mercado cambiario, y durante los 90´ la economía prácticamente se hallaba dolarizada debido al régimen de convertibilidad.
Hoy la Argentina se encuentra en un momento bisagra de su historia, donde podrá darle la espalda al modelo neoliberal (1976-2003) y afianzar el Modelo de Crecimiento Ecónomico con Inclusión Social. La reforma de la carta órganica del BCRA va en ese sentido.
Con respecto a las medidas sobre las divisas proponemos reflexionar sobre las situación contemplando la coyuntura o sea el objetivo del gobierno en el corto y mediano plazo: preservar las reservas del Central. En los últimos 30 días éstas apenas aumentaron USD 300 millones, ubicándose en USD 47.800 millones. En el segundo semestre, ante perspectivas concretas de una mayor volatilidad global, se concentran los mayores vencimientos de deuda (en agosto, USD 2.300 millones por el vencimiento del BODEN12) y además es el período menos superavitario de dólares comerciales.
Pero por otra parte debemos complejizar la reflexión atendiendo a tendencias de largo plazo, como la necesidad de avanzar hacia la pesificación plena y definitiva de la economía. Así como por otra sugerir el factor ideológico en algunos sectores de la población, ya que efectivamente el dólar no ha sido una buena inversión en los últimos nueve años, de hecho en ese período la divisa verde rindió 170%, y las acciones, 430%.

Para finalizar queremos dejar explicitados algunos presupuestos básicos a la hora de abordar esta temática:

  • Solamente el 11% de los argentinos ahorra en dólares.
  • Un plazo fijo en pesos desde 2003 hasta ahora representa más de un 50% de ganancia. El ahorro en dólares durante el mismo período representa menos de un 10%.
  • El mercado del dólar paralelo es solamente un 2,5% del mercado de divisas. La mayoría de los que acuden a ese mercado son los que no quieren justificar sus ingresos. Es un mercado ilegal en el que los especuladores ganan plata sin pagar impuestos. En Brasil hay 6 dólares por habitante. El dólar paralelo, en Argentina, es un mercado clandestino y de dimensiones pequeñas para la economía.
  • La divisa no es un medio de ahorro, sino un instrumento del comercio internacional. El ahorro está en la inversión.
  • El crecimiento del sector industrial requiere disponibilidad de divisas para sostener el abastecimiento creciente de bienes de capital, intermedios y energía.
  • El crecimiento acumulado de las exportaciones industriales desde 2003 a la fecha es de 263%. El respaldo de la moneda nacional no está dado por la cantidad de divisas de la economía sino por las riquezas que produce el país.
  • El viejo cuento monetarista de la especulación está superado.

POLIKARPO

“DOLAR: DE NUEVO EL FETICHE”
Informe de la consultora Analytico.


Esta semana, el dólar volvió a escena. La posibilidad del acceso minorista a través de los mecanismos formales (bancos y casas de cambio) se redujo prácticamente a cero con el endurecimiento de los controles fiscales, y así se disparó la brecha con los precios marginales, especialmente el “blue”. En tanto, el dólar que se utiliza para girar divisas al exterior (el “contado con liqui”) ya se acerca a los 6 pesos.

¿Cuáles son las razones que explican esta renovada tensión en el mercado de cambios, en un segundo trimestre que supone una mayor oferta de dólares por la liquidación de divisas de los exportadores de soja y derivados?
Veamos qué sucede con la oferta: según datos de CIARA-CEC (de mediados de mayo) en el año se acumula una liquidación de USD 8.090 millones, 5% menos que en igual período de 2011. Una diferencia menor, poco significativa, que no explica la astringencia casi absoluta que el gobierno impone hoy para comprar dólares en el mercado formal.

En realidad, lo que se está modificando en las últimas tres semanas es la percepción que tienen los inversores financieros ante algunos eventos internacionales.
Nuevamente Grecia es el centro de todas las miradas: su salida del euro parece segura, y algunos analistas (como Paul Krugman) le pusieron hasta fecha: junio. España navega en una economía de elevadísimo desempleo, caída de la actividad y un gobierno conservador que sólo atina a cumplir con su promesa de ajuste fiscal que, como siempre, profundizarán la depresión. Los recientes datos de China, en tanto, muestran una pobre performance en la industria, las ventas minoristas y la inversión. El crecimiento proyectado para el segundo trimestre cae casi un punto, de 8.5% i.a a 7.6%.

Así las cosas, la lluvia de inversiones financieras y reales, que en los primeros meses del año caía sobre las economías emergentes, ya paró. En Brasil, el flujo comercial (exceso de exportaciones por sobre importaciones) no alcanza en mayo a compensar las salidas de tipo financiero (incluyendo giro de utilidades). El saldo negativo es aún pequeño (USD 650 millones), pero va en línea con la caída de 45% en las entradas netas acumuladas desde enero, comparadas con 2011 (USD 25.000 millones). El efecto sobre el tipo de cambio fue inmediato: el real se deprecia 5% en el mes (superando R$2 por dólar), y 25% desde mayo de 2011. El gobierno de DilmaRousseff está confortable con la devaluación del real, que acompaña a los paquetes de estímulo productivo que son implementados para apoyar su castigada industria.

Bajo este escenario de mayor complejidad internacional, la fuga de capitales en la Argentina, que se había reducido entre enero y marzo, aumenta desde abril, y en particular a partir de los primeros días de mayo. En la primera quincena el BCRA compró USD 630 millones, bastante menos de lo proyectado. Sin embargo, controles mediante, en 2012 el Central acumula USD 5.900 millones en compras netas de divisas, frente a USD 4.500 millones en igual período del año pasado (+29%).

Como repetimos desde el Analytico, el gobierno tiene un objetivo macroeconómico básico, que es preservar las reservas del Central. En los últimos 30 días éstas apenas aumentaron USD 300 millones, ubicándose en USD 47.800 millones. En el segundo semestre, ante perspectivas concretas de una mayor volatilidad global, se concentran los mayores vencimientos de deuda (en agosto, USD 2.300 millones por el vencimiento del BODEN12) y además es el período menos superavitario de dólares comerciales.

Aún sin hacerlo explícito, es claro que la gestión CFK busca que los dólares del Central sean utilizados en estos meses para pagar tanto deuda como un flujo más “liberado” de importaciones. Los giros de utilidades y el atesoramiento minorista a precio regulado vienen después…

El camino para administrar la renovada tensión cambiaria es dificultoso. Un 25% de brecha entre el dólar regulado y el paralelo preocupa ahora más que en tiempos del episodio posterior a las elecciones, cuando la diferencia era de 10%. En un sentido, 25% es la expectativa devaluatoria que tiene una porción del mercado; desde Analytica, sostenemos, por el contrario, que no hay razones para que sea convalidada. El gobierno demostró a fines de 2011 que no corre por detrás del mercado, y cuenta con herramientas para operar. La estrategia cambiaria ha sido, y creemos que seguirá siendo, gradual, sin saltos bruscos. Pero el contexto externo –en particular, la depreciación del real brasileño- pone al gobierno ante un dilema: acelerar la tasa de devaluación y correr el riesgo de que sea percibida como una conducta defensiva, o perder competitividad frente al socio mayor del MERCOSUR.

Este momento de tensión cambiaria perturba, además, las principales negociaciones salariales, que el gobierno busca contener en aumentos que no vayan más allá de 22-23% en promedio. Un salto devaluatorio brusco echaría por tierra la intención oficial.

También, deben seguirse muy de cerca algunas conductas “micro”, como la de los productores agropecuarios, que ante la imposibilidad de acceder al mercado formal de cambios, luego de vender sus granos y recibir pesos a cambio, pueden retacear las ventas y estrangular el mercado, ampliando la brecha y realimentando el temor de los minoristas.

Mantenemos nuestra posición respecto de que no existen condiciones objetivas para desdoblar el mercado de cambios.Las reservas son suficientes para defenderse ante eventuales corridas contra el peso; los precios internacionales son elevados; los servicios de la deuda resultan muy manejables y el cuadro fiscal –aunque deteriorado- no es el de los años ochenta - cuando hubo diversas experiencias (todas fracasadas) de tipos de cambio múltiples-.

Pero también sostenemos, como antes, que “Las medidas de control de las compras de divisas no deberían generar demanda insatisfecha que haga aumentar el volumen del mercado paralelo, dándole cuerpo así a las presiones devaluatorias: los que operan en el segmento formal de la economía tienen que acceder sin problemas a los dólares. Dejar que el mercado fije el precio del dólar en condiciones de incertidumbre es la peor opción.” La estabilización de las expectativas debe ser el objetivo central de la política económica en estas horas.

“La pesificación que falta”
Por Mario Rapoport.

La Argentina no ha terminado de salir de su propio cepo mental, que no es sólo producto de la apetencia por el dólar o de tenerlo como moneda de refugio. Ésos son síntomas y no razones estructurales de una situación a la que en cierta forma muchos deudores están obligados a responder y otros se aprovechan para hacer negocios ilícitos. Si excluimos a los tránsfugas del mercado de divisas, la responsabilidad principal de que esto ocurra no está sólo en los que ahorran en dólares. Ese ahorro no ha sido muy fructífero durante la convertibilidad ni tampoco en los últimos años, salvo para dos cosas: viajar al exterior y cubrir las operaciones del mercado inmobiliario. Aquí sí está el verdadero problema. Los estímulos para el ahorro y los elementos de riesgo son mayores con un rubro de la construcción dolarizado y donde el sistema crediticio no funciona o funciona mal. El nudo de la cuestión radica en la dolarización de este segmento que mueve muchísimo más que el turismo externo y donde no sólo existen los que invierten para ahorrar o tener algún tipo de renta, sino una parte sustancial de gente que se involucra a fin de adquirir una vivienda digna, en un país donde el déficit habitacional es muy alto.
Introducir el dólar como la moneda de pago en este sector convierte sus operaciones en un sistema especulativo y de juego financiero que no depende de los propios costos de la construcción sino del capricho de los que especulan en el mercado de divisas, más aún si se da, por ejemplo, una situación, como la actual, de un cerrojo cambiario. Los contratos inmobiliarios que se hacen en dólares están presos de la misma enfermedad a la que nos llevó la convertibilidad o en la que está actualmente la eurozona en los países europeos. Dependemos de una moneda que no es la nuestra, que no tiene circulación legal forzosa, y con la que no se abonan los salarios ni se realizan negocios internos. De modo que no hay razón alguna para que el mercado de inmuebles permanezca dolarizado. De hecho, por ejemplo, en Brasil no lo está. Me llegan cotizaciones de viviendas usadas en el barrio de Tijuca, uno de los más caros de Río de Janeiro: varios departamentos de dos ambientes que van de 60m2 a 89m2 y cuyos precios oscilan, según calidad y ubicación entre los 275.000 a los 300.000 reales, o sea de 137.000 a 150.000 dólares al cambio oficial. Pueden estar más caros o más baratos que en la Argentina, pero su compra no depende de la cotización de una moneda extranjera, vinculada con los saldos comerciales o financieros de la balanza de pagos, a los niveles de reserva o a la simple especulación. Son operaciones que se concretan en el mercado interno y que desde hace años, con tasas de inflación iguales o mayores que las que tuvo o tiene la Argentina, han permanecido en reales. La divisa extranjera no entra en las operaciones inmobiliarias.
Esta cuestión es la que no permite resolver el problema de la salida de la dolarización en la Argentina y se convierte, principalmente, en una opción a la tenencia de dólares. Hay quienes afirman que esta situación es un resultado del proceso inflacionario y nos asustan diciendo que con una inflación del 25% nos vamos a una crisis como las del 2002 o a una formidable devaluación. Cierto es que consideran a la inflación aisladamente, nunca la vinculan con la tasa de crecimiento, de desempleo o a la distribución de los ingresos. Al “inversor global” sólo le interesa la inversión financiera, con tasas de inflación cercanas a cero, aunque el país no crezca ni se mejoren las condiciones de vida. Tampoco echan una mirada a procesos históricos anteriores. Martínez de Hoz en su discurso inaugural, cuando se hizo cargo de la cartera de economía en la última dictadura militar, puso como eje el combate a la inflación, entonces del 450% anual (leemos bien, no del 20 o 25%) y con sus políticas neoliberales (entre otras cosas comprimir brutalmente los salarios e iniciar un formidable proceso de endeudamiento externo) no la pudo achicar más que a niveles del 100 al 175% anual (no 20 o 25%). La dictadura dejó la economía, en 1983, con cerca del 340% de inflación anual, una tasa de crecimiento casi nula para todo el período y una profunda crisis desde 1981.
Pasamos de largo por las épocas hiperinflacionarias de Alfonsín y los primeros años de Menem (donde no podemos realizar comparaciones con la situación actual) y el santo remedio de la Ley de Convertibilidad. Ésta logró frenar la inflación, e incluso produjo deflación, pero a costa de altas tasas de desempleo, pobreza e indigencia y una destrucción de la industria. Si medimos de punta a punta el período Menem-De la Rúa, tuvimos una tasa de crecimiento cercana a cero, incluyendo la traumática crisis de 2001-2002. Luego vino la devaluación y pesificación asimétrica, el país superó el default, y comenzó un proceso de reindustrialización y de recuperación del empleo que nos protegió de la crisis mundial iniciada en 2007-2009.
En estos momentos la discusión de fondo debe centrarse no tanto en la medición de los índices de precios, aunque sea un tema de por sí importante, sino en las causas del proceso inflacionario. Esas causas están vinculadas con el alto grado de concentración de las empresas formadoras de precios, la transmisión al interior de la economía del aumento de los precios externos y otros factores, entre los cuales la puja salarial no es uno de los más relevantes porque siempre viene con retraso. Y aquí juegan de nuevo los efectos negativos de la dolarización del mercado inmobiliario. Es necesario, antes que nada, eliminar este sistema peculiar que alimenta la especulación, y por esa vía, también, el incremento de los precios.
El ahorro en dólares, moneda cada vez más devaluada a nivel internacional, se va a frenar si el gobierno toma una medida de este tipo, mucho más eficaz económica y políticamente que cualquier cepo cambiario o mercado desdoblado. Por un lado, la pérdidas sufridas por los “corralitos” (de Erman González a Cavallo) no evitaron nuevos refugios en el dólar. Por otro, la Argentina tuvo en los años treinta, bajo gobiernos conservadores de derecha, y por casi diez años, un estricto control de cambios, y en varias ocasiones posteriores diferentes tipos de cambios, con relativo o escaso éxito para frenar la inflación o revertir las frecuentes crisis de stop and go.
Ahora existe una política de flotación administrada del tipo cambio que ha dado resultado. En contrapartida, un torrente de agua no se detiene si no se ha construido antes un dique. Con el dólar pasa lo mismo; cuando no hay bienes cotizados en dólares nadie puede jugar con mercados paralelos, ni son necesarias medidas restrictivas.
Un camino loable para la obtención de divisas resulta sin duda la iniciativa de abrir nuevas fronteras en el comercio exterior –las relaciones Sur-Sur– teniendo en cuenta la disminución del intercambio con clientes tradicionales, como los países de la Unión Europea. Ese comercio, que ya venía siendo afectado por la incorporación en su seno de las naciones del Este y su alto grado de proteccionismo, tiene ahora como eje esencial una formidable crisis.
Las tareas del gobierno son varias. La economía argentina dispone de un colchón de reservas importante, ése no era el caso en el 2002, y altos niveles de producción y de empleo. Pero modificar malos hábitos adquiridos en el pasado requiere, ante todo, desactivar las causas que los provocan.


“El dólar fue la peor opción de inversión para los que creyeron rumores de devaluación”
Por Sofía Bustamante / Pablo Waisberg

El dólar no fue la mejor opción de ahorro en los últimos nueve años. Su rendimiento estuvo muy debajo de los depósitos a plazo fijo o las acciones que cotizan en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires, que ofrecieron beneficios entre un 214% y un 430 por ciento. Pero, además, esa suerte de fiebre verde –que ofreció ganancias de hasta 170%– alentó la fábula financiera que recorre la city porteña y endiosa a la divisa estadounidense. Ese juego que cruza temores, expectativas y compras de billetes colabora, en los hechos, a la licuación de la crisis financiera originada en las hipotecas basura creadas en los Estados Unidos.
“La falta de información y conocimiento sobre los rendimientos que genera cada una de ellas lleva a muchos ciudadanos a tomar sus decisiones de ahorro a partir de rumores y versiones que no tienen fundamentos económicos”, señalaron los economistas Andrés Asiain y Estanislao Malic, de la Cátedra Nacional de Economía Arturo Jauretche, en un trabajo que busca desmitificar al dólar como reserva de valor, que en los últimos días cobró vigor y aceleró el valor del blue.

Opciones. Si bien la venta ilegal de dólares retrocedió el jueves después de haber atravesado la barrera psicológica de los $6, las ruedas previas a ese cambio de rumbo estuvieron cargadas de incertidumbre. Al clima de nerviosismo se sumaron algunos pronósticos apocalípticos destinados a atemorizar a los ahorristas minoristas. Muchos de ellos, además, estaban (y aún están) enojados por las restricciones para la compra de dólares. Todo ese escenario alimentó teorías a favor de la adquisición de moneda verde en el mercado informal: incluso con cotizaciones que superaron en un 30% el valor oficial.
En el paper titulado “El dólar ¿la mejor opción para el ahorrista?”, Asiain y Malic señalaron que un inversor que en enero de 2003 eligió un plazo fijo en pesos –la opción más conservadora del mercado– tuvo un rendimiento acumulado de $21.400 hasta mayo de este año. Pero si hubiera optado por adquirir acciones habría logrado 43.000 pesos.

La fantasía. “En cambio, para quien apostó al dólar sus ahorros –$10.000– pasaron a valer $13.100, y si se arriesga y busca cambiarlos al paralelo tendría $17.000, es decir menos aún que quien optó por la tranquilidad de un plazo fijo”, indicaron los economistas.
Además de observar el comportamiento del mercado para las distintas opciones de inversión, se adentraron en el análisis de las versiones que alientan la compra de dólares y señalaron que “es falsa” la especie que califica de “inefectiva” a la restricción a la compra de la divisa estadounidense.
La batería de medidas oficiales incluye la necesidad de demostrar la capacidad de compra antes de adquirir dólares –una operatoria que generó muchas quejas por mal funcionamiento y supuestas inconsistencias– y la necesidad de declarar los viajes al extranjero para obtener divisas, que incluye el objetivo de evitar que las agencias de viajes vendan los paquetes turísticos en dólares y los paguen en pesos para comercializar los billetes en el mercado ilegal. También la administración central incrementó los controles en los pasos fronterizos para evitar que quienes viajaron durante el fin de semana largo sacaran dólares por encima de los límites permitidos.
Al analizar la consistencia del sistema, Asiain y Malic definieron que “también es una fantasía la idea de que la situación sea similar a la que llevó al derrumbe de la convertibilidad y que las medidas de restricción a la compra de dólares son el anticipo de un nuevo corralito. Un solo dato objetivo basta para desnudar la falta total de fundamentos de quienes buscan equiparar la situación económica presente con la existente a comienzos del siglo: el nivel de reservas acumuladas en el Banco Central”, subrayaron, y detallaron que las reservas pasaron de u$s14.000 millones en enero de 2002 a los actuales 47.643 millones de dólares. Llegaron, incluso, a superar los u$s50.000 millones y luego se mantuvieron fluctuando en torno del nivel actual.
El Gobierno mantendrá los controles para la compra de divisas y la fuga de dinero

Las restricciones para la compra de dólares se mantendrán esta semana, según indicaron fuentes de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP). Desde allí se iniciaron los controles en noviembre pasado que se intensificaron en las últimas semanas.
En los últimos días se sumó la medida para que quienes viajen al exterior deban completar un formulario en la web del organismo con los distintos datos de su viaje. Según se explicó oficialmente, esa nueva herramienta facilitará la compra de divisas pero el objetivo de fondo es desmantelar una operatoria común en las agencias de viaje: exigen el pago en dólares a sus clientes pero cancelan en pesos los paquetes turísticos pero con la cotización del dólar oficial. Luego venden los billetes verdes en el mercado informal y alientan el espiral del blue.

Pasos fronterizos. Además, durante este último fin de semana largo, el gobierno nacional volvió a disponer perros en los pasos fronterizos de la Argentina para evitar que quienes viajaron durante el fin de semana largo sacaran dólares por encima de los límites permitidos.
Agentes e inspectores de la Aduana y la AFIP realizaron operativos para detectar el cruce de divisas en la frontera con Uruguay en los pasos Concordia-Salto, Colón-Paysandú y Gualeguaychú-Fray Bentos. Esos tres puentes son considerados clave en la estrategia oficial.
En el caso de Colón-Paysandú, los agentes arribaron el viernes, en el inicio del fin de semana largo. Llegaron acompañados de perros entrenados para detectar dólares con su olfato.
En el marco de ese operativo, el viernes se incautaron unos u$s20.000 y alrededor de 10.000 euros en el paso del puente General San Martín, que une Gualeguaychú con Fray Bentos, Uruguay.

Los límites. Según datos del personal de la Administración de Aduana de Gualeguaycú, los billetes fueron encontrados en el interior de un automóvil de lujo en el que viajaban dos argentino.
En la actualidad se permite portar u$s10.000 por persona y la cifra que debe ser declarada en el paso aduanero. En el caso de los perros, están entrenados para detectar cantidades superiores a los 10 mil dólares y euros, siguiendo el olor de la tinta de los dólares de EE.UU.